Regalos promocionales de empresa más efectivos

Los regalos y obsequios corporativos son una iniciativa útil para incrementar la recordabilidad de la marca y las ventas de su cartera de productos y servicios, sin realizar una inversión que comprometa el presupuesto disponible para el resto de áreas de marketing.

 

Las libretas, cuadernos y carpetas publicitarias personalizadas destacan entre los regalos de empresa más extendidos, especialmente apto para sectores como el editorial, el de oficinas y papelerías o el educativo. Estos productos mantienen la imagen de marca en un lugar visible, y dado que su vida útil es superior a la de geles, ‘snacks’ y bolsas de transporte, sus beneficios perduran más en el tiempo. 

 

Las camisas y camisetas personalizadas con los colores y logotipo de la marca son otro producto estrella de esta modalidad de marketing. Dependiendo del tono y nicho de mercado de la empresa, el diseño de estos textiles apuntará a un consumidor objetivo u otro, lo que condicionará su estilo, tejido, etcétera.

 

Las bolsas de tela han incrementado su popularidad entre los regalos de empresa, pues a diferencia de las unidades de plástico y de cartón, pueden reutilizarse y no generan residuos perjudiciales para el medio ambiente. Su única desventaja es la inversión requerida, superior a la de las bolsas comunes.

 

Los instrumentos de escritura siempre han gozado de aceptación entre los regalos y obsequios de empresa. En concreto, los bolígrafos personalizados son fáciles de desarrollar y de distribuir y garantizan una óptima difusión de los principales componentes del ‘branding’: logotipo, tipografía, paleta de colores, etcétera.

 

Las nuevas tecnologías constituyen un mercado casi inexplorado para esta clase de marketing. Las memorias USB o pendrives son el artículo más explotado en este sentido, pero las posibilidades son ilimitadas: auriculares, wearables, altavoces, etcétera. Aunque el gasto inicial será más elevado, el impacto de estos productos superará con creces al de bolígrafos, camisetas y otros artículos carentes de innovación.

UN NUEVO HOGAR

Una pareja de amigos míos se han comprado una casa en Portonovo, que es un sitio al que no he ido demasiadas veces. La vez que más recuerdo es una vez que fuimos a una despedida de soltero en la que pasamos la noche de fiesta por ahí y dormíamos en el camping que había allí al lado del campo de fútbol. Recuerdo que lo pasamos de maravilla, pero no me pareció un sitio como para comprarse una casa porque es un pueblo relativamente pequeño. Con todo demasiado junto para mi gusto. El otro día nos invitaron a visitar su casa nueva y he de reconocer que la casa es muy acogedora, pero nos dijeron que antes de irse a vivir para allí les faltaba contratar un Seguro de hogar en Portonovo. Más que nada por seguridad es importante tener un seguro de hogar antes de entrar a vivir en una casa, por lo que pueda ocurrir. 

Personalmente me gustaría más una casa en un pueblo que no tenga costa porque de ese modo el pueblo sería mucho más tranquilo, llevo viviendo al lado de la costa desde hace cuarenta años y sé de lo que hablo. A la gente del interior de España les gusta ir de vacaciones a los lugares de costa y esos lugares en verano parece que aumentan su población demasiado para mi gusto y me gusta pasar mis vacaciones en un pueblo sin demasiada población y a poder ser con un río en el que te puedas bañar sin demasiado peligro. Porque los ríos parecen muy apacibles pero son muy peligrosos y nunca sabes lo que va a suceder. Todos los años hay un montón de víctimas en los ríos porque la gente se confía en los ríos y no lo deberían de hacer. En el pueblo de uno de mis amigos tienen una pequeña playa fluvial en la que te puedes bañar sin problemas ya que en esa zona del río no hay remolinos porque no tiene suficiente profundidad como para ahogarse. Esos ríos son lo que me gustan porque te puedes bañar casi en solitario sin que nadie te moleste.

La vendimia, una experiencia única en Galicia

En los meses de agosto, septiembre y octubre arranca la vendimia en Galicia, un periodo de intensa actividad vinícola, durante la cual se cosechan millones de kilos de uvas en comarcas como Monterrei, Rías Baixas, Ribeira Sacra, Ribeiro y Valdeorras, todas con reputadas Denominaciones de Origen que atraen cada año al público turista.

 

Pero un tour por las bodegas galicia rias baixas y de otras comarcas no es el único reclamo que la vendimia depara a los viajeros. La recogida de la uva es una época recomendada para explorar la naturaleza gallega en los parques naturales de Fragas do Eume, Dunas de Corrubedo, Estaca de Bares o Islas Atlánticas, sin mencionar los pintorescos paisajes de Cambados, Muros o Ribadavia, entre otras localidades marineras.

 

La comunidad gallega ha sido apodada como la ‘Tierra de los Mil Vinos’, y no sin razón: las variedades de vino (mencía, godello, albariño, brancellao, etcétera) y la oferta de bodegas sorprende por su amplitud. La vendimia es, sin lugar a dudas, el mejor momento del año para realizar un maratón de catas y visitas a museos dedicados a esta tradición milenaria, como el Museo do Viño de Galicia en Ourense o el Museo Etnográfico do Viño en Cambados.

 

La cultura tampoco falta a su cita con Galicia. Con motivo del periodo de recogida de uvas, se celebran en las principales comarcas de esta Comunidad Autónoma eventos indispensables para los entusiastas del vino: la Feria de la Vendimia de Monterrei, la Festa do Albariño, la Feira do viño de O Rosal, la Feria de Os Caneiros de Betanzos o la Feria do viño de Valdeorras son una pequeña muestra.

 

Porque el maridaje del vino forma parte de la experiencia de su degustación, la vendimia es buen pretexto para darle un ‘mordisco’ a la gastronomía local: el caldo gallego, el pulpo a feira, el lacón con grelos, los pimientos de Padrón y un largo etcétera de platos gallegos con los que celebrar uno de los acontecimientos más importantes del año.