Los parkings, en especial los situados en descampados y áreas sin vigilancia, pueden ser focos de inseguridad. El índice de robos y otros delitos cometidos en estacionamientos es elevado en ciudades de tamaño medio y grande. Cuando se desconoce la zona, se recomienda a los conductores buscar y reservar parking en Cadiz centro y otros municipios de forma telemática, en lugar de hacerlo in situ. De este modo, podrán consultar las experiencias de otros usuarios e informarse mejor del estado del aparcamiento.
En parkings públicos y privados, es aconsejable evitar los puntos ciegos o las plazas ocultas o mal iluminadas. Estos proporcionan una oportunidad a los delincuentes de actuar sin que miradas indiscretas puedan descubrir sus acciones. Como la mayor parte de los estacionamientos disponen de videovigilancia, dejar el vehículo a la vista, siempre iluminado, produce un efecto disuasor sobre los maleantes.
En cualquier caso, es importante guardar los objetos de valor (dispositivos electrónicos, ropa de marca, etcétera) en el maletero o la guantera. Mantenerlos a la vista puede despertar el interés de los delincuentes y motivar la rotura de un cristal y la posterior sustracción de bien. Por contra, la visión de sistemas antirrobo genera el efecto contrario, disuadiendo cualquier intentona de robo. En este sentido, los accesorios de bloque de volante o freno de mano son útiles.
Pese a reservar aparcamiento en una zona segura, siempre existe el riesgo de robo, motivo por el que se aconseja cerrar el vehículo siempre que se esté ausente. Que la detención sea breve no justifica esta negligencia, pues un delincuente avezado necesita menos de un minuto para forzar y hacerse con el control de un coche o ciclomotor.
Inmediatamente después de abandonar el vehículo, el usuario debe permanecer alerta, pues el blanco de los delitos no siempre es el coche en sí, sino su propietario. La ostentación de móviles, consolas y otros dispositivos electrónicos también es un error a evitar.