Las terrazas de hostelería forman parte, cada vez más intensamente, del paisaje de cualquier ciudad. Nos encontramos con terrazas que están montadas todo el año, que tienen toldos que las protegen y también con auténticas terrazas acristaladas que son, en la práctica, una habitación más del restaurante. Algunas cuentan incluso con aparatos de aire o con estufas, por lo que están climatizadas como si fueran espacios de interior.
Pero la mayoría de terrazas son las típicas que se colocan durante el día y se recogen a la noche, por lo que tienen que contar con elementos como la mampara separadora terraza para delimitar el espacio que van a ocupar. Estas mamparas se convierten, en algunos casos, en elementos distintivos de la terraza ya sea por su forma, ya sea porque tienen en grandes letras el logotipo y el nombre del local y ayuda a identificarlo de una manera muy rápida, evitando que los clientes puedan equivocarse y sentarse en las mesas de otro establecimiento, creyendo estar en el que pretenden visitar.
Otros elementos distintivos de la terraza son, sin ningún género de duda, los muebles. Los muebles pueden darle mucha personalidad a la terraza de un establecimiento. También nos pueden dar una idea muy clara de qué nos vamos a encontrar. Unos muebles de calidad, con un diseño bonito pero sobre todo práctico, que sean fáciles de limpiar y que resulten muy cómodos, son todo un acierto. Hay que evitar esas alternativas que, pretendiendo ser muy originales, hacen que los clientes se sientan incómodos al no poder adoptar posturas naturales o tener que sentarse en lugares muy elevados que no a todo el mundo le resultan accesibles.
Algunos ayuntamientos obligan a que en zonas concretas de la ciudad todas las terrazas tengan el mismo mobiliario, aquí los locales se las tienen que ingeniar para que sus espacios sean diferentes y tengan personalidad. Algunos lo consiguen colocando manteles vistosos, que pueden tener encima un cristal para no tener que cambiarse después de cada comida y evitar de paso que puedan volar. Otros, usan alguna decoración encima de la mesa para que se diferencien de las de la competencia. Una manera original de diferenciarlas es con una carta con un bonito diseño. Puede ser, por ejemplo, una carta en madera. Esto es ideal cuando no se cambia con frecuencia lo que se sirve en el establecimiento.